Equidad e Ideología de Género

Equidad e Ideología de Género

Aunque todo se quiere capitalizar, para confundiendo buscar ganancias políticas y económicas, cabe distinguir en estos días en que se vuelve a poner sobre la mesa el tema

de la ideología de género, y colocar su contenido en contra posición a la equidad, que por dignidad y repito mutuo le pertenece desde su nacimiento a la mujer.

Cuando digo capitalizar y poner sobre la mesa, me refiero lógicamente al mecanismo hartamente conocido por el pueblo dominicano, de distraer su atención, para que la gente por un momento olvide los temas cruciales y salirse el que más puede con la suya. Todo por aquello del concepto de la manipulación de las masas.

No se trata de que una ONG haya puesto el tema, que también podría responder a los mismos malsanos intereses, sino que el mismo ministerio de educación, sale adelante en estos momentos, donde el ex ministro Navarro ha dicho claramente, que no queda tiempo para modificar la constitución pues solo restan 30 días. Y donde la Junta Central Electoral, el Tribunal Constitucional y el mismo Tribunal Superior Electoral, están contra la pared, con múltiples cuestiones que cuestionarán la seriedad de sus gestiones y el potencial despropósito de sus institucionalidades.

Es en este preciso momento, cuando fluye cual busca pie navideño el tema de ideología de género, basamentado en una ordenanza del ministerio, que solo podría tener cabida si los maestros le apoyan.

Dicen que un procedimiento, una norma, una política, una ordenanza, una ley, no vale ni el papel en que está escrito, si la gente, el personal, los afectados le niegan su apoyo.

A veces pensamos que el poder lo tienen quienes fungen como funcionarios, olvidándose evidentemente del poder de la desobediencia civil y de las paralizaciones pacificas.
Aunque aquí la gran mancha morada permea toda la sociedad dominicana.

Pero en fin, no es lo mismo con guitarra que con violín, y tampoco es lo mismo, ideología o perspectiva de género que equidad de género.

La equidad de género se va al orden constitucional donde se establecen condiciones humanas iguales tanto para hombres como para mujeres. Aunque allí, en ese mismo documento, se protege a la mujer en lugar de proteger a la victima de agresión que podría también ser el hombre.

Pero aquí la idea es que por dignidad, por respeto, por derecho, las mujeres y los hombres se deben regir por las mismas leyes, consideraciones, deberes y derechos.

Por otro lado, la ideología o perspectiva de género, plantea una serie de ideas contra natura. Es decir, inducir a los niños al descubrimiento y la práctica temprana de temas sexuales que caen evidentemente en la degeneración, depravación, aberración y destrucción paulatina de la sociedad y la familia.







El principio natural en esta oportunidad coincide con aspectos teológicos y doctrinales de la iglesia cristiana y seguramente también coincide con aspectos que les son correlativos a otras formas o filosofías buscadoras de lo divino.

Pero, este enfoque naturista y biológico, sugiere la existencia de la genética, de los cromosomas, de los órganos reproductores tanto masculinos como femeninos, de la docilidad de fecundar, procrear, de los mismos instintos supremos de la maternidad. Instintos que no solo pueden verse en la raza humana sino en la mayoría de las especies de la zoología o reino animal.

La ideología o perspectiva de género, sugiere, que una persona puede decidir ser y comportarse con un género distinto al que la naturaleza le dio. Y de hecho, en la práctica lo intenta y quienes deciden violentar la naturaleza humana y seguir sus inclinaciones y apetitos desviados lo hacen y nadie los persigue legalmente.

Pero que no exista exclusión social de estos grupos y que no sean discriminados, y que sean acogidos por la sociedad es una cosa, y otra muy distinta es, que se promueva la teoría de la prueba y el error, para que los niños desde temprana edad determinen cual es o debe ser su preferencia sexual.

Que en nuestras escuelas se dote a nuestros niños de un conocimiento a destiempo, o un conocimiento que les libere en el sentido malsano de la palabra, para que opte por prácticas sexuales anti naturales, sería como dotar a la población de drogas, heroína, cocaína, para que prueben y luego decidan si desean o no ser adictos a las drogas.

No se trata de una posición dogmática. O una inclinación religiosa, o una identificación con el pensamiento neo o más conservador, como algunas personas tal vez ya practicantes de estas desviaciones plantean, sino la creencia de que por alguna razón la raza humana y el mismo reino animal, poseen características que distinguen en su naturaleza el comportamiento del macho al de la hembra.

No se trata de machismo o feminismo. El hombre no nace con Vulva ni la mujer con Pene. Por alguna razón será. Aunque no dudamos que el hombre perverso es capaz de crear híbridos, bebes probeta y ahora se habla de muñecas y muñecos para el sexo. No dejando de ser esto una depravación, una barbarie un despropósito, sobre todo cuando las cuñas vienen de los lideres políticos quienes por respeto a si mismo deberían guardar las formas.

Como se puede observar en estas líneas que les comparto, no hago alusión a lo que puede denominarse bueno o malo. Sino a lo natural y a lo contra natural.

Pues también resulta contraproducente apegándonos a nuestra cultura, tan hartamente pisoteada por lo que salen a la defensa de lo indefendible, pues hablamos de la iglesia y las 7 palabras para atacar al gobierno, pero no podemos hablar de su doctrina para decir que es abominación a ese mismo Dios de la biblia que claramente no aplaude a homosexuales, afeminados, sodomitas.

Esta doble moral de nuestros comunicadores incluyendo a los más afamados, se suman a la increencia aprendida que tiene el pueblo dominicano, que adolece de líderes verdaderos en todos los órdenes. Lideres para el bien, en la política, en los medios, en las redes, en la prensa, en las instituciones públicas y privadas, en las ONG, en las Iglesias.







Cuando nos conviene usamos la Iglesia para atacar y hasta destruir reputaciones. Pero cuando se tocan estos temas que convierten en libertinaje la perfecta libertad que promueve el evangelio, de inmediato catalogan de conservadores a los que salen a la defensa de la familia y del hombre en su conjunto.

Nuestras instituciones están minadas de personas, que siendo ya pervertidas, pues practican la homosexualidad o la sodomía, necesitan convertir su propio mal en el consuelo de tontos.

Ciertamente, todas nuestras familias en algún grado o con algunos ejemplos tienen personas que eligen una preferencia sexual atípica, no natural. Y estas personas no son rechazadas por las familias.

Creo que ninguna persona debe ser rechazada por su preferencia sexual.

Pero también creo que no es justo, prudente, correcto, ni moral, empujar a nuestros niños a probar o a conocer teóricamente aspectos que luego querrán probar personalmente. Dando pie con esto a múltiples delitos, como lo seria, la misma PEDOFILIA que seguramente algunos profesores aplicaran durante el proceso, al detectar niños con esas inclinaciones o ayudándoles a probar.

Amén del impacto que esto podría tener en nuestra sociedad y en nuestras familias.
Se habla de una estrategia nacional de desarrollo como escudo para empujar este tema desde la antigua secretaria de educación.

Un plan nacional de desarrollo que debería ser revisado en sus múltiples aristas, pues fue desarrollado con la participación de un porcentaje importante de Líderes para el Mal, como puede ser visto ampliamente con todos los escándalos de corrupción. Estando los mismos funcionarios envueltos.

Por estas razones entendemos que no debe existir discriminación por preferencia sexual, pero tampoco promoverse una sociedad cundanguil desde el Estado.

Por: Félix Julián Padilla